El multazo que te puede poner la DGT por conducir con la reserva: mucho cuidado
Lo mejor es tener lo mínimo posible el coche con el depósito en la reserva.
Conoce el uso de la ingeniería genética en la producción de combustibles.
El economista Gonzalo Bernardos advierte sobre el uso de combustible.
El llenado del depósito no es sencillo para la totalidad de conductores, puesto que algunos se terminan viendo obligados a cambiar su ruta habitual, y para otros no les suele venir bien de tiempo.
Todo ello termina provocando que abusen bastante de la reserva, y que de la misma forma agradezcan que ella exista. El no visitar la gasolinera hasta el último momento, cuando estemos cerca de quedarnos sin gasolina, es una práctica de lo más negativa al entrañar una serie de riesgos.
Los vehículos diésel o gasolina no tendrían que circular más de lo que sería necesario en la reserva.
No es algo que sea muy beneficioso ni para el automóvil ni para nuestra economía. Si eres de los que gustan de repostar de diez en diez euros, lo que no implica que gastes menos, puesto que al final va a tener que hacer un mayor número de visitas a la gasolinera.
De esta forma, vas a perder una mayor cantidad de tiempo y de dinero en combustible.
La reserva sale cara
No existe normativa expresa de sanción de quedarnos tirados sin gasolina, pero se puede producir una multa si el coche se queda inmovilizado. No deja de ser un entorpecimiento a la circulación, pero de la misma forma se puede producir una situación peligrosa para muchos usuarios de la vía.
Por todo ello, esto puede provocar una sanción a nivel económico de doscientos euros. Todo ello puede ir a mayores cuando además tomemos la decisión de dejar detenido el vehículo y aproximarnos a una gasolinera a por combustible.
La multa en estos casos puede llegar a ser de hasta tres mil euros por el transporte de líquido inflamable en un recipiente que no esté homologado. El caso es que te pueden llegar a poner otras multas.
¿Qué otras multas te pueden poner si te quedas tirado por la reserva?
No te olvides que va a ser preciso advertir a otros usuarios de la vía sobre la existencia de un vehículo averiado al colocarse los triángulos de señalización, que de no hacerlo conllevará una multa de ochenta euros.
A todo ello se le pueden sumar doscientos euros más en el caso de no llevar chaleco reflectante. Si lo de conducir en la reserva puede ser para algunas personas apetecible, también es cierto que nos puede salir más caro.
La reserva y las impurezas
Las instalaciones en las gasolineras acaban pasando revisiones cada poco tiempo en las que se van a examinar, desde los tanques hasta los surtidores pasando por la totalidad de elementos intermedios.
Los combustibles tienen que salir limpios, pero desgraciadamente es algo que no siempre se produce. En el almacenamiento, transporte o suministro, tanto la gasolina como el diésel llegan a tener una serie de impurezas que acaban en el depósito del coche.
Conviene no olvidarnos de que en los coches con más años, las impurezas pueden llegar de la misma corrosión del depósito. Dichas impurezas son más pesadas que la gasolina o el diésel, de tal forma que se acumulan a modo de sedimentos bastante dañinos en el fondo del depósito de combustible que quedan en su famosa reserva.
En el caso de que apures la reserva acabarás siendo un irresponsable, si hablamos de que harás que dichos sedimentos se terminen enviando hacia el motor.
Cuanto más tiempo se circula en reserva, mayores impurezas se pueden absorber y la acumulación derivará en muchas averías, son bastantes los problemas que pueden aparecer, por lo que es mejor no jugar con fuego.
Conducir en reserva produce distracciones
Debemos saber que en el artículo 90, el Reglamento General de Circulación lo que hace es prohibir el aparcamiento en sitios indebidos, salvo que se produzca un accidente, una necesidad que puede aparecer en el caso de que te quedes tirado sin que te quede combustible.
Estamos ante un hecho, el llevar el coche en reserva acaba generando un estrés máximo en el conductor, lo que hace que se distraiga, al no poder estar todo lo pendiendo que debiera en la carretera.
En dichos momentos de nerviosismo y angustia, al no encontrar pronto una gasolinera suele ser habitual invertir tiempo extra en atender al piloto que indique el estado del combustible, o buscar maneras de ahorrar algo de combustible para ir apurando dichos kilómetros al acabar la reserva.
¿Cuánto me dura la reserva?
Si hablamos de la distancia que podemos recorrer con la reserva, la respuesta va a depender de cada vehículo. Cada coche es un turismo distinto, pero suele oscilar entre los cincuenta y los ochenta kilómetros.
Algo que se debe valorar es que no debemos fiarnos al cien por cien de lo indicado en el cuadro de mandos, pues dicha cifra que vemos en pantalla estará basada en cálculos de recorridos anteriores.
Está claro que los recorridos no son siempre los mismos, pero para no llegar a situaciones limite, lo mejor es evitar sufrir y que el coche sufra también por una deficiente planificación del combustible